Impreso XVIII: cuando era yo, niña chica

Desde que era yo muy niña
siempre disfrute soñando.
Soñaba con mil juguetes
sin lograr nunca alcanzarlos.

Una vez, una gran bruja
se paseaba volando
con una escoba muy vieja,
bufanda y negro refajo.
La bruja subía deprisa
y quiso volar tan alto
que una estrella se interpuso
y la atizó un escobazo.

El cuento de blancanieves,
por un tiempo, fue mi blanco.
Me gustaba imaginar
jugando con los enanos
¡Y hasta vi a la princesita
con el peine envenenado!

Otra vez llegó mi sueño
a derroteros tan altos
que llegándome a la mar…
Era un barco ¿o era un palacio?
Lo que sí vi fueron hombres.
Todos con patas de palo,
la nariz larga y picuda
y con un ojo tapado.
Yo me marché de este sueño
más que deprisa, volando,
porque me pareció ver
a piratas navegando.
¿Habéis visto alguna vez,
mis niños míos amados,
a un caballo volador
llegar al sol y besarlo?
Pues yo lo vi, ya lo creo,
lo vi despierta y soñando.